El Barça certifica su pase a 1/8 con goleada a la Cultural

El FC Barcelona ha sellado este miércoles el pase a los octavos de final de la Copa del Rey al ganar a la Cultural y Deportiva Leonesa (4-1) en el Camp Nou en la vuelta de los dieciseisavos, partido en el que fue muy superior y despejó las dudas de la ida a la par que jugadores como Denis Suárez o Munir aprovecharon su oportunidad.

Del 0-1 de la ida, con gol de Clement Lenglet al final del duelo en el Reino de León, salieron dudas sobre el mal rendimiento del equipo y de algunos jugadores poco habituales. Esta noche, esos mismos señalados brillaron, como Munir con gol y Denis Suárez con doblete, y el equipo se entonó para golear a la Cultu que, no obstante, se fue con gol de honor del feudo blaugrana.

La nota discordante fue la posible lesión del brasileño Malcom, que también marcó y se desquitó del mal partido de ida. Tras una contra que parecía fallida, Ivan Rakitic rescató el balón y puso un gran centro al interior del área al que Malcom, libre de marca, llegó para rematar de cabeza. Marcó en la Champions contra el Inter de Milán, y también se estrena en la Copa del Rey.

Era el 3-0, justo antes del descanso, que sentenciaba la eliminatoria. Antes, remató Munir desde el interior del área, a la media vuelta y con la pierna derecha, enviando a la red un balón que recibió de Ivan Rakitic para abrir la lata. Segundo gol de Munir en lo que va de temporada, y envió otro disparo al palo que le alejó del doblete.

Sí lo firmó Denis Suárez. En el minuto 26, recibió un buen balón en la frontal del área, condujo el balón y se preparó el disparo para colocar el balón a la cepa del palo izquierdo de la portería defendida por Palatsí para el 2-0. Un buen gol del gallego, aprovechando la oportunidad de la titularidad en la Copa. Después, aprovechó una genialidad de Riqui Puig.

El segundo tanto del gallego dejó en anécdota el gol de Josep Señé en el minuto 55 para la 'Cultu'. El equipo de Víctor Cea entró combativo al partido, forzando córners y llegando a poner en aprietos a Jasper Cillessen, que salvó a los suyos de encajar un gol en el primer tiempo. En el tanto visitante, no atajó bien un disparo de Mancebo, ni el posterior remate, y el balón llegó franco al catalán Señé para marcar el tanto del honor.

La comidilla de la previa del partido en Barcelona fue Riqui Puig. Desde que entró en la convocatoria se esperaba con grandes augurios el debut de este joven y menudo centrocampista de Matadepera, uno de los grandes valores de la actual cantera. Debutó, entrando en el 55 por su compañero en el filial Oriol Busquets, y lo hizo con creces y asistencia.

Puig, eléctrico con el balón, estuvo acertado en la creación de juego, en la asociación con Carles Aleñá o con un Sergio Busquets que también había entrado de refresco. Atrevido, motivado, se iba rápido arriba desde la medular y en una acción de precisión picó el balón suave para asistir a Denis Suárez en el segundo gol del gallego, el cuarto del Barça.

Por cierto, durante diez minutos coincidieron en el terreno de juego Oriol y Sergio Busquets, que sólo comparten el apellido pero no son familia. El primero calcó al de Badia y cuajó una buena actuación, en una noche en la que otros miembros del filial jugaron. Chumi, primero de central y luego de lateral derecho, y Miranda, en el lateral zurdo, también dejaron buena huella. Aleñá, ya miembro de pleno derecho del primer equipo, ya no entra en esta lista.


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