Un 1º cuarto sensacional de PAO decide el triunfo de los griegos ante Baskonia

Baskonia perdió este jueves ante el Panathinaikos (63-72) y puso freno a su sensacional racha en la Euroliga después de un partido que siempre tuvo dominado el cuadro griego, sobre todo por el acierto de Chris Singleton, autor de 18 puntos, en uno de los duelos que inauguró el vigésimo octavo capítulo en la máxima competición continental.

El conjunto de Sito Alonso no pudo sumar la quinta victoria consecutiva este jueves. Después de asaltar la cancha del Brose, el martes pasado, Baskonia no pudo dar continuidad a su buen momento y se topó con un PAO excepcional en defensa y muy sobrio en los momentos más delicados del partido.

Los helenos, dirigidos por el español Xavi Pascual, comenzaron con la sexta marcha y prueba de ello fue el 4-14 que instalaron en el marcador a los seis minutos. La superioridad fue manifiesta gracias a los puntos y acciones de Feldeine, Gist y James, ex de Baskonia, que se sintió muy a gusto en la que fue su casa durante los dos últimos años.

Los locales intentaron mejorar, pero Panathinaikos continuó enseñando sus cartas. Primero con un Singleton sensacional y después con un Calathes que fue el criterio y el orden personificado. Ocho asistencias, seis rebotes, y 3/4 en tiros de dos. Guarismos que refuerzan el gran partido del jugador estadounidense.

Las distancias comenzaron a enjugarse tras el segundo cuarto, pero Baskonia nunca llegó a rebajar los diez puntos. No parecía el día para un equipo que había sido capaz de lo mejor en los cuatro últimos compromisos europeos y de lo peor en los dos primeros cuartos de este jueves. Esas sensaciones y ese cambio de imagen acabó apareciendo en Vitoria. No sirvió para ganar, pero sí para maquillar las sensaciones.

Budinger se puso manos a la obra y Shane Larkin -otra vez- aprovechó para hacerse un hueco en la estadística. Hanga, con 13 unidades, terminó siendo el máximo anotador en los vascos, pero el vigor de Voigtmann y los puntos de Diop acabaron por devolver la esperanza a la grada del Buesa Arena, que confió en los suyos hasta el final.

Así, un triple de Budinger logró dejar el 50-58 e incluso, a tres minutos para el final, Baskonia llegó a ceder solo por seis (61-67) después del aterrador primer cuarto. Budinger, que tanto había dado hasta este momento, falló una bandeja y acabó por condenar a los suyos en un final esperpéntico con más fallos que aciertos.

Baskonia, que se queda séptimo, ha perdido una oportunidad, pero sigue teniendo la posibilidad de ser cabeza de serie. Ahora, los de Sito Alonso no dependen de sí mismo y deberán esperar un traspié de Panathinaikos y también del Efes Anadolu, que ocupa la sexta posición provisional.


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