El Atletico prolonga su buen momento con la victoria ante el Brujas con doblete

El Atlético de Madrid ha vencido este miércoles en casa al Club Brujas por 3-1, gracias a dos goles de Antoine Griezmann y uno de Koke, en un partido correspondiente a la segunda jornada en la fase de grupos de la Liga de Campeones, asentando a los colchoneros en lo más alto de la tabla y además prolongando su buena dinámica otoñal.

Tras su irregular inicio de Liga que empañaba el título de supercampeón de Europa logrado en pleno agosto, el Atleti ha empezado el otoño con recuperación de juego y sobre todo de resultados, reenganchándose a la cabeza de Primera División mientras FC Barcelona y Real Madrid han generado dudas incluso en competición europea.

Así, los rojiblancos se tomaron el duelo frente al Brujas como otro peldaño igual de importante y con novedades atrás, apareciendo en escena el colombiano Santiago Arias por la derecha y el francés Lucas Hernández por el costado zurdo. Los planes de Diego Simeone pasaban por ganar velocidad en lugar de solidez, contrarrestando el esquema 3-4-3 con carrileros que había dispuesto el conjunto belga sobre el césped del Metropolitano.

A rebosar, el estadio rojiblanco veía de nuevo a su equipo en la máxima competición continental tras el fiasco del pasado curso contra Chelsea, Qarabag y compañía. Aunque los pupilos del Cholo Simeone huyeron de sentimentalismos y como es costumbre impusieron un ritmo 'in crescendo', cuyo primer aviso llegó en el minuto 11 con un contraataque mal llevado por Koke Resurrección por la izquierda, después de que Arias robase un balón en la frontal de su propia área.


Saúl Ñíguez, de inmediato, aprovechó su cada vez mejor ubicación en ese lado izquierdo y disparó desde lejos, pero su zurdazo se marchó cruzado. Era el turno de los mediapuntas y pronto apareció el francés Thomas Lemar, filtrando un pase a la espalda de la defensa y sirviendo un gol cantado a su compatriota Griezmann; éste marcó con una pequeña vaselina para batir al portero Karlo Letica, pero la jugada fue anulada por fuera de juego, muy justito aunque poco protestado.

Luego fue Diego Costa quien se animó, robando en las cercanías del área rival y asistiendo al hiperactivo Lemar, cuyo remate fue repelido por Letica a córner. Se acercaba la media hora de encuentro y los del Cholo hallaban huecos en la defensa de un Brujas tímido, con escasos acercamientos desde la derecha gracias a la insistencia de Thibault Vlietinck.

El equipo entrenado por Ivan Leko ofrecía poco catálogo y lo pagó caro en el minuto 27, cuando Griezmann rubricó el 1-0 tras un lance a balón parado. El jugador franquicia del Atleti intuyó el barullo dentro del área, se escoró al flanco diestro y vio cómo Lemar ejecutó un centro desde el lado opuesto, que nadie alcanzó a rematar ni despejar pero que acabó a los pies del galo; el '7' rojiblanco bajó la pelota al piso y disparó con la zurda para rebasar a Letica por abajo.

Los locales, espoleados por ese tanto, merodearon el 2-0 en un par de triangulaciones de Costa con Koke y de Lemar con Saúl. No obstante, el peligro real se desvaneció y el Brujas igualó la contienda al borde del descanso. En un ataque por la banda izquierda, el balón le llegó a Arnaut Groeneveld varios palmos fuera del área y, sin mediar otro plan, conectó un zambombazo con el pie contrario que se coló cerca de la escuadra; enmudeció a Jan Oblak y a la afición local, con el gesto torcido al descanso.

La actitud del Atleti mejoró al comienzo de la segunda parte, con Thomas Partey sumándose a las tareas ofensivas a la vez que Lemar seguía de escudero para un Costa batallador. Ambos tuvieron apoyo desde el flanco izquierdo de Filipe Luis, que había entrado de refresco por el amonestado Josema Giménez; el lateral brasileño recobró su buena sintonía con la grada, incisivo arriba y resolutivo en una defensa a cada minuto más adelantada.

El Atleti ya aceleraba sin mirar el retrovisor, achuchando a los jugadores del Brujas en cada lance. Sin embargo, para despejar el runrún de la grada hacía falta algo más que un par de fogonazos; y ahí Griezmann salió al rescate por enésima vez, presionando la salida de los defensores contrarios y conectando bien con Costa y con el argentino Ángel Correa, recién introducido en el campo en detrimento de Thomas.

En otra cabalgada del 7 por el costado izquierdo, en un desmarque se plantó en el área de Letica y pasó al delantero hispano-brasileño, quien hizo dos recortes y devolvió la pelota a Griezmann para que éste efectuase un zurdazo raso en diagonal y a la cepa del poste (min.66). El 2-1 alegró a la parroquia local... pero no al banquillo, donde Simeone se encontró con el imprevisto de ver a Costa lesionado; se había lastimado en el escorzo de esos dos regates, así que el Cholo recompuso su línea medular con Rodri Hernández.

El Brujas apretó de manera inconexa, sin hallar soluciones a excepción de cuando Wesley abría el campo hacia la derecha con sus desmarques. Poca pólvora de los belgas, aunque a punto de obtener recompensa de un Metropolitano feliz por la trayectoria ascendente de su equipo. Correa pudo redondear más el marcador con un remate alto, franco delante de la portería rival, tras un pase de la muerte del omnipresente Griezmann; no quiso el hat-trick y cedió la ocasión al argentino, pero se fue a las nubes su oportunidad de hacer el 3-1.

Sí lo consiguió Koke, en un contragolpe llevado por el lado zurdo y estando atento a un rechace, bien colocado en el interior del área y superando con un tiro seco a Letica. La tranquilidad ya estaba asegurada para un Atleti que alcanzó los 6 puntos, de 6 posibles, gracias a esta corta victoria. Con ello igualó en cabeza al Borussia Dortmund, con quien dirimirá las posiciones de privilegio de un Grupo A que se aclara para los madrileños, olvidando ese dolor de muelas que fue el Qarabag durante el otoño del 2017.


TWITTER: @Deportes_sc 

Registrate ya: https://docs.google.com/forms/d/1D6V-D3BzaSiPORNSfMsSVA1eph2bYxIBSG4vVIlX4Ao/viewform?usp=send_form