Baskonia certifica su presencia en los PlayOffs tras lograr el triunfo ante Maccabi

El Baskonia no ha dejado pasar una oportunidad inmejorable y se ha clasificado para el playoff de cuartos de final de la Euroliga tras batir este jueves en Vitoria al Maccabi Tel Aviv (83-72), su rival directo por el pase, en duelo perteneciente a la penúltima jornada de la fase regular.

El equipo vitoriano, en un excelente estado de forma, encadenó su sexta victoria en la máxima competición continental y redondeó su gran remontada en esta Euroliga. Junto con el Real Madrid, el baloncesto español volverá a tener a dos representantes entre los ocho mejores de Europa, un cartel que se completa con una semana de adelanto.

Casi 14.000 personas acudieron al Fernando Buesa Arena para apoyar a su equipo, que empezó la Euroliga con cuatro derrotas consecutivas, pero que de la mano de Pedro Martínez ha ido creciendo hasta llegar a un mágico mes de marzo en el que ha ganado los nueve partidos que ha disputado.

Su premio será pelear por la sexta Final Four de su historia y, cumplido el primer objetivo, aún le queda otra meta en esta fase regular: evitar el octavo puesto que empareja con el temible CSKA Moscú. A falta de que la penúltima jornada se complete este viernes, sus perspectivas son más que halagüeñas porque es sexto provisionalmente y la semana que viene recibirá al colista Anadolu Efes, recién apalizado por el Barça (83-107).

Sin jugar su mejor baloncesto ante el Maccabi, que venía de una trayectoria opuesta y encadenó su cuarta derrota, el Baskonia siempre dio sensación de dominio llegando a alcanzar máximas rentas de diez puntos tanto en el segundo cuarto (34-24, min.16) como en el tercero (51-41, min.26), pero el equipo israelí, de la mano de Pierre Jackson (14) logró equilibrar el marcador antes del último cuarto (53-53, min.29).

En ese momento, apareció el argentino Patricio Garino, el último en sumarse a la causa, con tres mates casi consecutivos que encendieron a la parroquia local y reactivaron a sus compañeros en la misma medida que empequeñecieron a un Maccabi demasiado individualista cuando apretó la defensa local.

La autoridad interior de Johannes Voigtmann (14) y Vincent Poirer (9 y 9 rebotes) permitió que el Baskonia ni siquiera necesitara la versión estelar de su capitán Tornike Shengelia (9 y 7), mermado por problemas de falta y que estuvo menos de medio partido sobre la cancha, pero el tiempo suficiente para dejar la canasta de la noche en un 2+1 en contraataque con mate incluido.

Con el partido cada vez más decantado del bando local, una nueva canasta de Voigtmann puso una distancia casi insalvable a falta de tres minutos (73-64), periodo en el que la defensa local apretó los dientes y no dejó escapar la victoria más importante en una temporada de clara trayectoria ascendente para el Baskonia.


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