Luis Enrique: "Es uno de los partidos más atractivos que se pueden ver en Europa"

El entrenador del Barcelona Luis Enrique Martínez ha reconocido que le "encanta la palabra triplete", pero ha recordado que "hasta que no se cace el oso no se vende la piel", antes de una eliminatoria "sin favorito" ante el Bayern Munich, un rival que "tiene plantilla suficiente para soportar las bajas", por lo que su "peligrosidad es la misma".

"¿Quién te ha dicho que no me gusta la palabra triplete? Me encanta, pero los profesionales sabemos que de tres títulos podemos pasar a cero. La realidad es que podemos conquistar cualquier títulos, pero hasta que no se cace el oso no se vende la piel. Somos cuatro equipos en Champions y nosotros pretendemos llegar a la final. Esa es la realidad", explicó Luis Enrique en rueda de prensa.

El asturiano apuntó que su equipo tiene "sensaciones positivas, como no podía ser de otra manera", tanto "por la cita" como "por la importancia de la eliminatoria y del rival". "Los dos equipos necesitamos el balón, también para defendernos. Es uno de los partidos más atractivos que se pueden ver en Europa", aseguró antes de recibir a un adversario "muy potente, con muchos recursos en ataque y muy intenso en defensa".

"Sin ninguna duda es uno de los mejores equipos del mundo. El Bayern tiene plantilla suficiente para soportar las bajas, lo ha hecho durante bastantes meses con jugadores importantes lesionados. La peligrosidad del rival es la misma. Independientemente del perfil de jugador que esté enfrente, vamos a intentar hacer lo mismo de anteriores eliminatorias", analizó.

Luis Enrique no cree que "haya favorito en una semifinal de este nivel" y añadió que van a intentar "a hacer un poco lo del Bayern", que pasa por "jugar igual fuera y en casa", ya que no ambos equipos no saben "afrontar este deporte con otra visión".

"Jugando en casa somos un punto más fuertes y vamos a intentar que se note esa diferencia. Ya adelanto que la vuelta será igual que lo que hemos ido haciendo todo el año, ir a ganar independientemente de la ida. No hay nada que me dé miedo de un rival a nivel futbolístico. Respeto, por supuesto", aclaró.

En ese sentido, apuntó que no sabría decir si el Bayern "es más peligroso a doble partido". "Solo sé que es muy difícil jugar contra el Barça a dos partidos y a uno, y con esa conclusión me quedo. Somos un equipo fuerte y si seguimos haciendo las cosas bien tendremos muchas oportunidades de llegar a la final", confió.

A la hora de preparar el duelo, el gijonense subrayó que "estos partidos tienen un punto de facilidad" porque sabe "los jugadores van a estar metidos al máximo, incluso a veces tienes que frenarlos para que no se pasen de intensidad", algo que no piensa pedirle a la hinchada del Camp Nou.

"Espero que la afición juegue el papel que le he visto en cada semifinal de Champions, la de mayor apoyo y contundencia, sobre todo cuando el rival nos haga daño. Si puede ser un punto más efervescente, mejor. Estoy contento con nuestra afición", se congratuló.

A la hora de personalizar, al técnico azulgrana se le preguntó por el reencuentro de Thiago y Rafinha, opinando que a ambos "les da igual que sea su hermano como que sea su tía, quieren que gane su equipo y todavía se vacila más a un hermano que a un amigo".

"Se trata de disfrutarlo. Los jugadores tienen la ilusión de triunfar en el Barça, pero no todos caben. Thiago decidió abandonar el club, pero no puedo decir mucho más porque yo no estaba en el club en aquel momento", recordó, antes de negar cualquier comentario respecto a su futuro.

"No tengo nada que hablar nada que no esté relacionado con el presente inmediato. En el fútbol no es que no exista el futuro, es que ni siquiera hay nada más allá de dos días. Solo interesa esta eliminatoria, lo demás habrá tiempo de sobra para hablarlo", cerró.


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