Muguruza no aprovecha su ventaja ante Pliskova y acaba cayendo en su estreno

La tenista española Garbiñe Muguruza ha sucumbido en su debut en las Finales del WTA en Singapur frente a la checa Karolina Pliskova (6-2, 6-7(4), 7-5) después de protagonizar una reacción en el momento preciso que llegó a ponerla la victoria muy de cara con un 0-4 de arranque en la manga definitiva, y se vino abajo tras desperdiciar una bola de partido con 5-2.

La jugadora de origen venezolano dispuso un inicio turbulento que pronto se transformó en el primer punto en contra, pero una magnífica respuesta llegó a mutar por completo sus opciones. Dos breaks para iniciar el tercer 'set' dejaron el trabajo medio echo para Muguruza, pero dicho privilegio se vino abajo después incluso de dispuner una bola de partido en el séptimo juego de partido.

El primer set se desarrolló como estaba previsto. Pliskova tiró de la fortaleza de su saque y de su agresividad al resto para dominar a una Muguruza, con mejores sensaciones que anteriores semanas, pero todavía sin conseguir regularidad en sus golpes, con muchos errores no forzados (11).

La checa mandó con su servicio, con el que sólo perdió siete puntos en toda la manga y no concedió ni una sola bola de rotura, y con el resto fue muy agresiva, poniendo continuamente en problemas a la de Caracas, que no tardó en ceder en dos ocasiones su servicio.

La campeona de Roland Garros, que sigue sin tener bien su tobillo izquierdo, tardó poco más de media hora en entregar la primera manga, y el inicio de la segunda no fue demasiado esperanzador. Pliskova no dejó de buscar puntos lo más cortos posibles y rompió en el primer juego para tomar enseguida la iniciativa.

Sin embargo, Muguruza no perdió la calma, afianzó desde el fondo sus golpes y comenzó a crear más problemas al resto. El resultado fueron la primeras opciones de break y una racha de cuatro juegos consecutivos ante una checa por primera vez incómoda en la pista y que se quedaba al borde del abismo (5-3).

Pero la centroeuropea apretó de nuevo el acelerador y logró una rotura clave para volver a igualar un set que se terminó de decidir en un tie-break donde la hispano-venezolana levantó un 3/0 inicial para forzar un tercer y definitivo parcial.

Con las buenas sensaciones con las que concluyó este segundo periodo, la número 6 del mundo se dispuso a prolongar su notable mejoría en pista. En este instante, dos roturas de saque consecutivas pusieron muy de cara el último set para una Muguruza que, no obstante, acabó perdiendo todo el beneficio cosechado.

Pliskova no había dicho su última palabra. Sus vidas no se habían terminado y respondió devolviéndole el golpe a la española después de que desperdiciara la posibilidad de cerrar el encuentro con un match ball con 5-2 que la bloqueó por completo y que dio paso a cinco juegos consecutivos para la checa que culminaron la machada.

Tras el varapalo, Muguruza tiró por tierra el poder comenzar compartiendo el liderato del Grupo Blanco con la rusa Svetlana Kuznetsova y terminó cayendo a la parte baja del grupo junto con la polaca Agnieszka Radwanska.


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