El Unicaja desperdicia su ventaja y acaba perdiendo en Limoges

El Unicaja perdió hoy incomprensiblemente con el Limoges por 67-64 tras dilapidar 20 puntos de ventaja en unos horribles tercer y cuarto periodo, donde solamente anotó 12 y 18 puntos, aunque está virtualmente clasificado para el Top 16 tras la victoria del Maccabi ante el ALBA Berlín.

El equipo malagueño inició muy concentrado el encuentro, sin dar opciones al Limoges, y con una sólida defensa maniató a su rival. Un triple del base serbio Stefan Markovic (6-15, minuto 8) obligó a pedir tiempo muerto al entrenador local para frenar el vendaval cajista.

Además, el pívot Fran Vázquez, se imponía dentro de ambas zonas, era el amo de los rebotes -cuatro- de los puntos -cinco- y asusto al conjunto francés con dos tapones. El partido transcurría plácido para el Unicaja, que seguía aumentado su ventaja (8-23, m. 13). El Limoges se veía impotente para anotar y el equipo malagueño insistía en sincronizar el juego exterior e interior (12-32, m. 16).

El Limoges estaba haciendo uno de sus peores partidos, inoperante en ataque y blando defensivamente. El entrenador francés Jean Marc Dupraz tenía que cambiar el signo del encuentro y lo hizo con una defensa zonal que valió para conseguir un parcial de 7-0 y acortar diferencias (21-34, m. 20).

Doce puntos en el tercer cuarto condenaron al Unicaja contra un Limoges en ascenso, con una defensa zonal que no supo atajar ni atacar y con el pívot Batista -14 puntos y 18 de valoración- aupando a su equipo al sueño de la remontada (43-46).

El único jugador del Unicaja que oponía resistencia era el ala-pívot estadounidense Will Thomas. Los demás prácticamente desaparecidos.

Empezaba un nuevo partido de diez minutos. El Limoges espoleado por su afición se adelantaba en el marcador por segunda vez, tras la canasta inicial del partido y fue en una buena acción de ataque (47-46, m. 33).

La situación se complicaba para el Unicaja, con un mal porcentaje en el lanzamiento y solo 12 puntos en 33 minutos. El técnico Joan Plaza buscaba un cambio desde el banquillo y llegó con dos triples consecutivos del escolta estadounidense Ryan Toolson y su compatriota, el ala-pívot Caleb Green (47-52, m. 34).

A partir de ese momento la igualdad fue constante, con alternativas hasta el final, aunque el triple del escolta estadounidense Jamar Smith (63-61 a falta de 50 segundos), suponía el primer paso para el triunfo.

El Limoges, más entero y menos nervioso, no falló desde la línea de tiros libres, a pesar del triple de Toolson a falta de diez segundos (65-64), pero dos lanzamientos seguidos errados -uno de ellos un triple de Suárez que hubiera forzado la prórroga- dieron la victoria a los franceses por 67-64.




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