Los Oklahoma City Thunders encarrilaron la serie ante los Houston Rockets con una nueva victoria (101-104), gracias a un Kevin Durant estelar que anotó 41 puntos, cogió 14 rebotes y repartió cuatro asistencias en el tercer triunfo de la eliminatoria.
A pesar de no contar con Westbrook como escudero de lujo por lesión, la estrella de los Thunders supo echarse el equipo a la espalda para poner el 3-0 en la serie que ya parece que caerá del lado de su equipo.
Un primer cuarto magnífico, en el que los locales alcanzaron los 39 puntos sirvió al equipo de Ibaka para dar un golpe de autoridad ante sus rivales. El ala-pívot volvió a aportar tanto en defensa como en ataque y acabó el encuentro con 17 puntos y 11 rebotes. Un doble-doble que le permitió situarse como el segundo máximo anotador de Ocklahoma.
Los Rockets ofrecieron pelea, sobre todo mientras le duró la gasolina a Harden, que terminó con 30 puntos. En los dos últimos periodos, los locales bajaron el pistón, principalmente en anotación y ahí tuvo Houston la oportunidad de llevarse el partido. En el último tiempo llegaron a ponerse por delante 101-102, pero dos tiros libres de Jackson terminaron por decantar la balanza del lado de los Thunders.
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